Il. 8: El cerebro humano tiene 2 hemisferios c/u con 4 lóbulos, total:8 lóbulos (Fuente: Google)*

Neuromitos en la Educación Su influencia en el aula y en los padres de familia (8ª. Entrega)

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Mito 36. Nuestro cerebro está dividido en 4 grandes territorios: lóbulo frontal, lóbulo temporal, lóbulo parietal y lóbulo occipital.

No es cierto. De acuerdo con la información de los investigadores neurólogos, nuestro cerebro está dividido, no en 4 lóbulos, sino en 8, si se tiene en cuenta que nuestro cerebro tiene 2 hemisferios, y que cada uno tiene 4 territorios, llamados lóbulos (lóbulo frontal, lóbulo temporal, lóbulo parietal y lóbulo occipital), cada uno tiene sus respectivas fronteras internas y externas que se denominan surcos y cisuras; por consiguiente, no son 4 lóbulos, sino 8 (4 lóbulos en cada hemisferio cerebral), que interactúan como un todo, mediante conexiones facilitadas por el cuerpo calloso que los une. (Cfr. Facundo Manes y María Roca, 2017, pp. 195-196).

Mito: 37: El avance tecnológico y la investigación constante para el avance y mejoramiento de las computadoras, podrán llegar a imitar al cerebro humano.

Esta afirmación,no es aceptable, debido a las capacidades y características complejas que tiene el cerebro humano, tales como la capacidad de comprensión, de adaptación a momentos y situaciones nuevas e imprevistas, capacidad de creatividad, capacidad plástica para remodelar sus circuitos, además de su capadidad única de adaptarse a un contexto en cambio permanente, y su enorme capacidad natural de aprendizaje. Al respecto, el neurólogo y científico Facundo Manes (2014, pp. 51-52) afirma: “El cerebro /humano/ tiene una capacidad plástica para remodelar sus circuitos que aún la tecnología no ha logrado igualar. /…/ la complejidad del cerebro – y su plasticidad- excece la comparación con una computadora. Será muy difícil crear una simulación parecida a la del cerebro humano por su capacidad única de adaptarse a un contexto en cambio permanente”.

Mito 38: En las personas, no hay forma de fortalecer las neuronas porque nacen, se desarrollan y mueren inevitablemente, sin dejar remplazo.

Esta afirmación no es cierta; por una parte, las células sí se reproducen, lo cual hoy se conoce como “neurogénesis”. Al respecto, las neurólogas Sarah-Jaine Blakemore y Uta Frith (2015, pp. 43-45) dice: “La generación de neuronas recibe el nombre de neurogénesis. Se trata de un proceso complejo que comienza con la división de células progenitoras, las proveedoras de todas las células nuevas del cerebro. Esta división da origen a otras células progenitoras, o a neuronas, o a células de soporte, conocidas como glía”. Por otra parte, las neuronas sí se pueden fortalecer, en la medida que se ejerciten y también pueden beneficiarse de un medio ambiente enriquecedor en que viva la persona, como aquellos medios que favorecen el ejercicio del cerebro, una alimentación sana y cuidadosa, promovida en su contexto familiar y sociocultural. Sobre este tema, Facundo Manes (2016, p. 56) afirma: “Las neuronas pueden morir por procesos degenerativos, o por toxicidad” y más adelante: “A partir de modelos tan básicos, hemos aprendido que la estimulación (tanto social como intelectual) generan redes más complejas que pueden retrasar y contrarrestar los efectos de la degeneración neuronal”.

Mito 39. Hay emociones que son universales, por consiguiente, se manifiestan en todas las culturas.

Esta afirmación no es válida, de acuerdo con muchos estudios científicos ya realizados y otros que aún hoy se están llevando a cabo. Por una parte, se está afirmando que todas las culturas manifiestan de la misma manera las emociones, lo cual no es tan cierto, ya que, por ejemplo, la emoción de la alegría, de acuerdo con el registro histórico, los griegos y los romanos antiguos cuando sentían la emoción de alegría, no se reían espontáneamente; la palabra ‘sonrisa’, ni siquiera existía, ni en griego ni en latín antiguos. De acuerdo con la psicóloga y neurocientífica Lisa Feldman Barrett (2019, p.77), sonreír fue una invención de la Edad Media, que sólo se popularizó hasta el S. XVIII, cuando la odontología se hizo más alcanzable. De acuerdo con esta investigadora (2019,p. 68), no se puede dar la categoría de emociones universales que todo el mundo reconozca desde su nacimiento, y más adelante, complementa afirmando que para captar apropiadamente una emoción no se puede sacarla de su contexto; para confirmar esto, a manera de ejemplo, la misma investigadora (2019, p. 81) menciona casos de campañas políticas para elecciones, como la campaña política de elecciones en el 2003-2004, cuando el gobernador Howward Dean de Vermont buscaba la candidatura a la presidencia de EE UU por el partido Demócrata, pero por un video en el que se veía su rostro con gestos de furia lo hicieron ver como una persona furiosa e intimidante, al mostrar su rostro fuera de contexto, cuando en realidad era un gesto de entusiasmo que llenaba de fervor a la gente con pasión, lo cual tergiversó la interpretación de la emoción real del momento, logrando así desprestigiarlo y perder.

BIBLIOGRAFÍA
BLAKEMORE, Sarah-Jaine y Frith, Uta (2015). Cómo aprende el cerebro. Las claves para la educación. Edit. Planeta; 3ª. Reimpresión. Barcelona. (Título original The learning brain, 2005).

FACUNDO MANES, Mateo Niro. (2016). Usar el cerebro. Conocer nuestra mente para vivir mejor. Edit. Planeta, Bogotá. (1ª. edic. 2014).
FACUNDO MANES, Mateo Niro, y Roca, María (2017). Descubriendo el cerebro. Neurociencia para chicos (y grandes). Edit. Planeta, Bogotá.
FELDMAN BARRETT, Lisa (2019). La vida secreta del cerebro. Cómo se construyen las emociones. Colec. Paidós, 3ad., Edit. Planeta, Bogotá, (Ver el mito de las emociones universales, págs..67-83). (Título original: Haw Emotions Are made New. Publicado por Houghton Mifflin, New York).
*GOOGLE. Il. .8: El cerebro humano: 2 hemisferios, c/u con sus correspondientes 4 lóbulos. (Fuente: Google ilustracion+lobulos+cerebrales+libres+derechos+de+autor).

Especial para Revista Edu.co
Por:
Jesús Gúttemberg Bohórquez C. (GIMNASIO LAS PALMAS)
Educador e investigador. Escritor educativo y de aprendizajes
Lic. Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia
Postgrado de Especialización Seminario Andrés Bello, Bogotá
Postgrado Univ. de Augsburg (Alemania)
Exinvestigador del Instituto Caro y Cuervo, Bogotá
Exinvestigador del Sprachenzentrum, de la Univ. de Augsburg
Cofundador de la Universidad S. Martín. Bogotá.
Rector Fundador del colegio Gimnasio Las Palmas y de Cetincol S.A.S., Bogotá