Seguramente frases como: “¡nunca me haces caso!”, “¡siempre terminas peleando!”, “¡Eres muy brusco!”, entre otras, hacen parte de nuestro léxico y de alguna forma, de nuestro diario vivir, que a veces es invadido por la presión y no nos deja ver lo que realmente hay detrás de estos mensajes.
Cuando repetimos a nuestro hijo que ES algo negativo, que SIEMPRE actúa inadecuadamente, y NUNCA hay comportamientos buenos en él, estamos reforzando la idea de que esa es su ESENCIA, lo estamos convenciendo de no poder actuar de forma diferente, y condicionando al resto del mundo a tener que soportar cualquier tipo de comportamiento, porque estamos convencidos de tener un hijo necio, brusco, inquieto, enérgico, egoísta.
Por otro lado, si analizamos la expresión, así sea en positivo, también lo estamos obligando indirectamente a actuar de una u otra forma, la realidad es que no necesitamos formar niños que siempre están felices, o que nunca pierden el control, mas allá de buscar una perfección que no es propia del ser humano, requerimos un SER que tenga la posibilidad de experimentar sentimientos, pensamientos, acciones y reacciones, de nuestra mano para lograr finalmente entregar al mundo un SER íntegro, con herramientas que le permitirán tener una vida plena, no perfecta pero si feliz!
El niño SIEMPRE es amoroso, inocente, enérgico, inteligente, amigable, respetuoso, compasivo, alegre, simpático… aunque este SIEMPRE no nos da opción de equivocarnos, es mejor afirmar en positivo y reforzar con un desenlace que abra las puertas a la reflexión en caso de un comportamiento inadecuado… “Tu siempre eres respetuoso, qué pasó hoy que actuaste de forma diferente?”
El niño NUNCA es necio, mal educado, grosero, brusco, bruto, tonto, antipático, esquivo… De igual forma ese NUNCA nos limita la posibilidad de equivocarnos para aprender, en caso de usarlo podemos aprovechar para reforzar comportamiento positivos… “nunca habías respondido fuerte a papá, seguro paso algo que te hizo contestar así, pero, crees que era la forma adecuada?”
El niño ES amor en su esencia mas pura, ES un explorador descubriendo el mundo, ES un ser lleno de luz. ES producto de sus guías, de nosotros sus padres… cuidemos mucho la expresión tu ERES, podemos COMPORTARNOS, ACTUAR, RESPONDER, REACCIONAR… de muchas formas sin dejar de ser lo que somos o convertirnos en algo que no hace parte de nuestra esencia.
TAREA para los PADRES…
Contemos cuantas veces al día usamos estas palabras!!!
Nos hemos acostumbrado a mencionar la acción inadecuada, y adicional lo acompañamos de un refuerzo negativo: NUNCA, SIEMPRE, ERES…
Especial para Revista Edu.co*