La importancia del desarrollo de la creatividad en los primeros años

La importancia del desarrollo de la creatividad en los primeros años

Comparte este artículo

Hoy en día se habla de las habilidades del siglo XXI que se deben desarrollar en los estudiantes y una de ellas es la creatividad, pero ¿Qué es la creatividad?

Se considera la capacidad para dar respuesta o soluciones originales ante un problema, o la capacidad de pensar en ideas nuevas e innovadoras que sirvan para generar un cambio o impactar el medio que nos rodea.  Es una habilidad, y como tal requiere preparación, incubación, iluminación y trabajo duro; pero es claro que es en la infancia cuando mejor puede ser cultivada, por lo que es importante que nos esforcemos en que nuestros niños la potencien.

¿Pero por qué se desarrolla mejor la creatividad en la infancia?

Es porque en esta etapa el niño es mucho más receptivo a los estímulos y tiene una gran capacidad de imaginación que aún no está limitada por el conocimiento ni la racionalidad que nos impone la sociedad. El desarrollo de la creatividad está profundamente relacionado con el desarrollo del cerebro y las múltiples conexiones que se van a ir formando en los primeros años de vida. Estas conexiones  en gran parte dependen de las experiencias que tenga el niño durante estos años; los niños son auténticos pensadores divergentes. Con una capacidad innata para producir ideas creativas de forma libre, generosa y sin verse limitados por su propia autocrítica.

¿Cómo podemos potenciar la creatividad en la infancia?

Debemos ayudar a nuestros niños a conocerse a sí mismos, a desarrollar sus potencialidades y lo más importante, a quererse con esas capacidades, actitudes y aptitudes que poseen. Es necesario que se apliquen estrategias para su desarrollo; y es importante promover espacios donde el niño pueda aprender a ser más abierto, más flexible, más imaginativo y de esta manera poder crear ideas innovadoras. Fomentar la creatividad de un niño implica participar de forma activa en su aprendizaje, motivándolos a investigar, experimentar, tolerar el fracaso y ser persistente.

La provocación es uno de los métodos del pensamiento lateral, completamente contrario a nuestro pensamiento lógico normal, en el cual solamente puedes decir cosas que tengan sentido, que se ajusten a nuestra experiencia y a lo que hemos dicho antes. Con la provocación no existe una razón para decir algo hasta después de que se dice. Por eso nos permite abrirnos a nuevas ideas.

Todos estamos dentro de una caja llena de restricciones, expectativas, conceptos y percepciones que usamos y nos movemos en esa caja. Pensar fuera de esto significa, escapar, liberarse, cambiar de percepciones, cambiar reglas y desarrollar nuevas ideas. Ideas que no habrían sido previstas en nuestro comportamiento usual.

Como adultos debemos respetar todos los intentos de creatividad del niño, sin importar el resultado final.Permitirles explorar y tomar decisiones de forma libre. Acercarlos al arte: descubrirles estilos musicales, visitar museos, enseñarles poesía y muy importante: Dejar que se aburran y pongan en marcha su imaginación. No debemos encajarlos dentro de nuestros preconceptos que limitan su imaginación.

En el Cumbres Preschool trabajamos con una metodología de proyectos, con retos, trabajo colaborativo y juegos que tienen como fin potenciar esa creatividad que tienen nuestros estudiantes. Este año han fabricado máquinas, han creado fábricas, han ido al espacio y al mar, para descubrir animales fantásticos y los recrearon usando diferentes técnicas artísticas.

Hemos tenido un año lleno de aprendizajes y retos que los alumnos debieron resolver. Seguiremos desarrollando esta habilidad, que es indispensable para que al terminar su vida escolar puedan salir a transformar la sociedad siendo verdaderos líderes católicos de acción positiva.

Por: Colegio Cumbres
Especial para Revista Edu.co
Acerca del Colegio Cumbres
El Colegio Cumbres es una institución ubicada en el municipio de Chía, con educación diferenciada, calendario B, bilingüe, fundada en 2000. Tiene como objetivo facilitar los procesos de formación y desarrollo de personas íntegras, que, por su preparación humana, intelectual, espiritual y social, sean líderes católicos de acción positiva, que promuevan el auténtico desarrollo del ser humano y la sociedad.